En esta ocasión me gustaría escribir sobre un tema muy importante para el oficio pictórico; un objeto importantísimo, que lamentable suele ser olvidado, o queda como ultima prioridad en el equipamiento del estudio de un artista.
Hablo de la paleta, ese mágico lugar donde los pigmentos se mezclan y los colores nacen. Yo siempre he pensado que los artistas deberían poner mucha más atención en sus paletas; pues es mucho más que el lugar dónde se realizan las mezclas.
Piensa que todo lo que hay en tu paleta, eventualmente, terminará en tu cuadro. Si tu paleta es un caos, donde aprietas el tubo de óleo en cualquier parte, está llena de colores sucios, desorganizados, con mezclas que terminan siendo grises indefinidos, pintura costrosa, y un revoltijo donde no se distingue lo que es cálido de lo que es frío; muy probablemente dicho desastre también se verá en tu cuadro, y no lograrás ninguna armonía cromática (sólo manchones poco agradables).
Y lo que es más importante; y que es algo que he visto una y otra vez, es que una de las características más notorias que los pintores que tienen un gran dominio sobre el color tienen en común (entiéndase grandes impresionistas como Monet o Seurat, o pintores contemporáneos de gran reconocimiento como Richard Schmid, Jeremy Lipking, o Daniel J. Keys), es que sus paletas son impecables, inmaculadas, en extremo organizadas, y SIEMPRE limpias antes de empezar una nueva obra.
De Izquierda a
derecha; las paletas de Georges Seurat, Camille Pissarro (el primer
impresionista), y Pierre Auguste Renoir. Tres grandes maestros de la
pintura universal que destacaron por su genial manejo del color.
Noten el alto grado de organización que tienen las pilas de pintura,
no es algo aleatorio en ningún caso.
Aunque bueno, si de paletas bien organizadas se trata, imposible no mostrar esta que perteneció a Delacroix, y qué dejó preparada a modo de mostrar su metodología. Hoy se exhibe en el Lourve, y tiene una historia interesante. Si quieres saber más:
El GRAN maestro
Richard Schmid pintando en su estudio. Se trata de uno de los grandes
maestros pintores de nuestra época (de hecho lo apodan "el John
Singer Sargent del siglo XX"). Su libro "Alla Prima;
Everything I know about Painting", es una lectura más que
obligatoria para cualquier persona que pretenda aprender el oficio de
pintor, en serio, LÉANLO. Y por favor, noten el tamaño generoso, la
limpieza, y el nivel de organización que tiene su paleta de vidrio
(que tiene un papel gris por debajo, para que sea de un color
neutro).
***
Llegados a este punto, alguno me podrá argumentar que el caos de una paleta puede originar cosas "interesantes" desde el punto de vista creativo, y que algunos grandes pintores de la historia no eran precisamente organizados con sus paletas. Y si bien es cierto (sólo en cierta medida), no es un criterio por el que alguien que quiere aprender el oficio tradicional debiese guiarse.
Como imagino ya intuyes, quizás el mejor ejemplo de un gran artista que no era organizado (o mejor dicho, no parecía organizado) con su paleta sea Vincent van Gogh:
La paleta de van Gogh, exhibida hoy en el museo de van Gogh en Amsterdam. No parece tener el grado de organización de las otras, PERO...
Pero hay un detalle que no se puede olvidar, en ningún caso, y es que van Gogh era un GENIO, una persona extraordinaria que tenía una sensibilidad que el común de los mortales no poseemos (o no desarrollamos). Por eso era capaz de pintar como pintaba, independiente de lo organizada o caótica que pudiese ser su paleta.
Y por eso decirle a alguien que recién comienza a adentrarse en este maravilloso mundo de la pintura, que da lo mismo si pinta con una paleta caótica o una ordenada, porque para van Gogh daba lo mismo. Seria algo igual de estúpido que decirle a un zurdo que quiere aprender a tocar guitarra, que da lo mismo si practica con una guitarra para diestros, porque Jimmy Hendrix (que también era un genio) era zurdo y podía tocarlas sin problemas.
En serio, no es por ser pesado, pero lamentablemente NO todos somos genios (lo que no nos impide ser grandes artistas, por cierto), y pintar con una paleta caótica, es en términos generales, una mala practica. Como también son malas practicas pintar desde fotos, o con luz artificial (pero eso ya es tema para otra entrada).
***
Hoy por hoy existe una cantidad enorme de superficies que son usadas como paletas; desde la paleta tradicional de madera (aunque hoy por hoy todas las que venden son de terciados), vidrios, acrílicos, cartones preparados, y los típicos block de papeles desechables. Y también vienen en todas las formas y tamaños que uno se pueda imaginar.
Claude Monet a la
izquierda, y el gran pintor ruso Ilya Repin a la derecha. Ambos con
sus tradicionales paletas de madera de gran tamaño. Un par de datos
interesantes; al final de su vida, Monet estaba casi ciego debido a
las cataratas, por eso pintaba en formatos gigantes, y sus últimos
cuadros están a un paso de la abstracción (no podía pintar cuadros
pequeños, ni con más detalle). No obstante su ceguera, durante este
periodo nos legó algunas de las piezas más exquisitas en la
historia de la pintura, como los estanques con nenúfares.
Repin, también al
final de su vida, cuando estaba radicado en lo que hoy es Ucrania;
estaba muy mal de salud, al punto de que no era capaz de sostener su
paleta, y a duras penas podía sostener el pincel. Aún así eso no
le impidió seguir pintando; ¿la solución?, se amarro la paleta con
un arnés a la altura de su cintura, y aprendió a pintar con la mano
izquierda (tal como se ve en la foto). Para reflexionar un poco;
cuando a uno de verdad le apasiona lo que hace, mueve montañas por
continuar haciéndolo.
Sin embargo la paleta tradicional de madera es prácticamente irreemplazable si pintamos en gran formato, de pie (que es como tradicionalmente se pinta), y en un espacio grande (o al aire libre), donde donde podemos ver el modelo y alejarnos/acercarnos constantemente de la obra en ejecución.
No soy un experto en la materia, pero supongo que se pueden fabricar de una gran variedad de maderas. Yo personalmente la mejor de estas paletas que he tenido fue una de Raulí (que venia en un kit Artel de los 70s). Con otras de terciado (imagino que de pino) que venden ahora, no me ha ido muy bien, en general se tuercen.
Es algo también recomendable empapar este tipo de paletas en aceite de linaza (varias veces si es necesario), antes de usarlas, para que no te absorban el aceite de la pintura y su superficie sea mas cómoda para la misma. Y por sobre todo, y esto es MUY importante; NUNCA, pero nunca, dejes la pintura oxidarse encima de tu paleta, debes restregar los restos de óleo en la misma paleta al final de cada sesión (lo que también hará que la superficie se vuelva más cómoda con el paso del tiempo). El óleo endurecido es bastante difícil de quitar de la madera. Y si la quitas probablemente dañaras la paleta misma (yo perdí una paleta por esto).
Gran variedad de
formas en las que pueden venir las paletas tradicionales de madera;
para todos los gustos y necesidades. Foto cortesía del fabricante de
paletas norteamericano "New Wave Artist Palettes"
(http://www.newwaveart.com/). Para aquellos a los que les pueda
interesar, esta compañía vende replicas exactas (en tamaño, forma,
y materiales), a las usadas por grandes artistas, como Sargent.
Pero hay que ser justos, y prácticos. Evidentemente no todos tenemos un estudio amplio donde podemos estar de pie junto al modelo, y movernos con libertad frente a la obra. La GRAN mayoría pintamos en espacios chicos (ni siquiera un "estudio" como tal, muchas veces simplemente el escritorio de nuestra propia pieza), donde con suerte cabemos nosotros junto al modelo, sentados, trabajando en formatos chicos, y frente a un caballete de sobremesa. Y por supuesto ahorrar tiempo y pintura es una prioridad.
Frente a esto, he visto que la mayoría se decanta por los block paleta (donde cada hoja es una paleta desechable), lo que parece cómodo y practico a primera vista, ya que no tienes que limpiarla, y parece ideal para alguien que pinta sentando y tiene poco espacio.
La típica, clásica,
y popular paleta/block desechable de papel.
En lo personal, debo decir que odio este tipo de paletas, en serio, las aborrezco con todo mi ser. Y tengo buenas razones para ello:
I - Por lo general traen un agujero que rara vez cumple su función (pues son usadas por gente que pinta sentada el 90% del tiempo), y disminuye como en un 30-40% el ya escaso espacio que traen para mezclar.
II - En mi experiencia, se deforman a medida que uno las va usando. No es es chiste; no se si será que las que he tenido han sido de muy mala calidad, o he usado solventes muy poderosos (cosa que dudo), o no las he guardado apropiadamente, o simplemente he tenido mala suerte. Pero el hecho es que se deforman y se vuelve desagradable mezclar en ellas.
Una de mis paletas de papel de uso personal, deformada luego de un poco de uso.
III - Son caras, y debes comprar una nueva cada cierto tiempo, lo que te significa un gasto extra permanente y completamente injustificado.
IV - Y la principal razón por la cual me cargan: Al ser desechables, uno debe adivinar cuanta pintura va a sacar del tubo en cada sesión, cosa de que no te falte, ni tampoco te quede en la hoja que vas a desechar (y los buenos óleos son bastante caros, lo que menos queremos es desperdiciarlos). Esta estimación "al ojo" rara vez se cumple, pues el acto de pintar no es como hornear un pastel; no existen recetas fijas que te digan con exactitud cuanto vas a necesitar de cada color, sino que se va viendo sobre la marcha. ¿Que significa esto?, que al final terminas pintando con rastrojos de pintura, apretando el tubo con cuidado a cada rato, y al final igual desperdicias un buen porcentaje de la pintura. Todo ello es, por supuesto, una completo y absoluto hastío.
***
Habiendo dado mis razones de por qué no me gustan los block paleta, la pregunta original sigue abierta. ¿Que opción tenemos los que pintamos sentados y en espacios reducidos, además de necesitar ahorrar pintura, tiempo, y dinero?
Bien vamos por partes,comencemos por responder la primera parte de la pregunta; ¿cual es la mejor paleta para alguien que pinta sentado y tiene poco espacio?. Pues mi humilde opinión, es que simple y llanamente un trozo rectangular de vidrio común y corriente con un papel/cartulina gris por debajo. Mis razones:
I) Puedes cortarlo del tamaño preciso que necesites y se acomode al lugar donde pintas.
II) Es extremadamente fácil de limpiar. Incluso si el óleo se endurece en su superficie, lo puedes quitar muy fácilmente con la hoja de un cartonero (al contrario de lo que pasa con las paletas de madera).
III) Su superficie es inherentemente cómoda para el pincel y la pintura; no necesitas empaparlo en aceite ni usarla un buen tiempo para conseguir una superficie agradable (a diferencia de la madera).
IV) No tiene "hoyos", se aprovecha toda su superficie, y dado su peso se quedará estática en el mueble/mesa donde la dejas mientras pintas.
V) Puedes darle un color neutro automáticamente poniendo un papel/cartulina gris debajo del vidrio. La gracia es que no te influya en lo absoluto mientras mezclas, algo que no pueden decir las paletas de papel blancas (el blanco es un pésimo color de fondo para una paleta), ni las de madera (que igual tienen algún color).
Francamente estoy
convencido de que es la mejor opción para los que pintamos sentados
y en lugares reducidos. Que estoy seguro, somos la mayoría.
Pero, hasta ahora sólo hemos resuelto la mitad del problema original que teníamos. Sigue presente el principal problema común con las paletas de papel; ¿Cómo no desperdiciar pintura, pero evitar pintar con rastrojos y abrir los tubos a cada rato? (es un dilema donde hay que elegir entre pintar cómodo vs. ahorrar pintura);
Si dejamos una cantidad generosa de pintura de cada color en la paleta, cosa de que no tengamos que estar abre y cierra con los tubos de óleo a cada rato. Eventualmente las pilas de pintura comenzarán a oxidarse (algunos colores antes, otros después), y se les formará una "costra" en la superficie, que no es nada agradable. Finalmente tendremos una paleta que se verá así como esta:
No sé a uds., pero a mí me duele la guata el ver toda esa costosa pintura desperdiciada.
Hay dos "soluciones" que son clásicas para esta problema:
I - Meter la paleta al refrigerador (o al congelador). Esta es una solución "parche", el proceso de oxidación ocurrirá igual pues igual hay oxigeno dentro del refrigerador, sólo que una temperatura más baja no favorecerá la termodinámica de la reacción, y retardará la formación de las "costras" en las pilas de óleo, pero estas aparecerán igual eventualmente. Por lo demás tampoco es muy buena idea tener la pintura junto a la comida (especialmente si pintas con cadmios, cobaltos, o blanco de plomo)
II - Sumergir la paleta en agua entre cada sesión. Si, esto efectivamente crea una barrera entre el oxigeno del ambiente y el óleo, y mantendrá la pintura "fresca" por más tiempo que meterla al refrigerador. Pero si somos francos, tampoco es algo demasiado practico (además de que sólo puede hacerse con una paleta de vidrio o de plástico).
***
Entonces; ¿existe otra solución más cómoda, practica, y efectiva al problema?, la respuesta es que si, y es el método que yo uso, pero vamos por partes:
Antes que nada, necesitamos una paleta húmeda para acuarela que sea grande y tenga tapa. Ojo, debe ser una paleta grande, no esas pequeñas y potables que se abren con bisagra.
Artel comercializa una bien buena, perfecta para lo que queremos, a través de la Librería Nacional (en la de Matias Cousiño quedan algunas, pero apúrense, que es un producto descontinuado).
Fue gracioso, porque
cuando la compré, era la que estaba de muestra en la vitrina, estaba
sucia y sin su envoltorio. Por eso regateé con los encargados de la
tienda y me la lleve a casa por menos de 5 lucas. Su tamaño ronda
entre los 30 x 40 cms, más o menos, el plástico es grueso y de muy
buena calidad, y la tapa trae una goma alrededor del borde para
aislar el interior cuando se cierra.
La modificación con el vidrio es necesaria, ya que el plástico es una pésima superficie para mezclar colores al óleo, y queremos que esa zona de mezcla sea removible para poder limpiarla fácilmente.
Y no sé si lo habrán notado, pero esta paleta resuelve de cuajo uno de los problemas iniciales que teníamos, y es que sus pocillos individuales te obligan a ser ordenado y bien organizado con los colores. Yo asigne a cada pocillo un color especifico (ej: a uno, los rojos fríos, a otro los azules cálidos, etc.). Así queda después de ordenar los colores en ella:
Debo decir que estoy
muy feliz con este invento mio, esta paleta es perfecta para mis
necesidades.
Bien, como ya intuirán por la imagen, a mi lo que me gusta son los colores de los impresionistas. Por eso mi paleta de colores está compuesta por colores parecidos a los de los impresionistas (pigmentos vivos pero inorgánicos que se agrisan al mezclarse con blanco), y separo en lineas muy definidas los cálidos (línea de arriba) de los fríos (linea de abajo).
Los negros, tierras, y ocres (que rara vez uso), están a la izquierda, y el blanco generalmente lo pongo como una linea al centro de la paleta. Los otros pocillos los ocupo con mediums, colores extra, solventes (Gamsol), o masillas de carbonato de calcio. Mis colores actuales (que se pueden ver en la foto de arriba) son:
Cálidos:
-Rojo Cadmio (PR108)
-Amarillo Cadmio (PY37)
-Verde Oliva (PY129)
-Azul Ultramar (PB29)
-Y mi favorito; Violeta Ultramar (PV15)
Fríos:
-Rojo de Antraquinona (PR177)
-Cadmio Limón (PY35)
-Verde Viridian (PG18)
-Azul de Ftalocianina -green shade- (PB15:4)
-Violeta Cobalto (PV14), este color es precioso, pero carisimo (y es imposible obtenerlo por mezclas), sólo lo uso para dar toques especiales al final del cuadro -y con muuucha moderación-.
Otros:
-Blanco de Plomo (PW1, cuidado que es toxico)
-Blanco de Titanio/Zinc (PW4/PW6, -en aceite de cártamo-)
-Amarillo Cromo de antimonio-titanato (PBr24).
-Negro Marfil (PBk9), este rara vez lo uso.
-Muchos colores tierra de muchos fabricantes que rara vez uso. No tengo nada en contra de los colores tierra, algunos son preciosos, y son los pigmentos más clásicos que existen, es sólo que no me ayudan a conseguir el "look" impresionista que busco en esta etapa de mi vida.
*Les dejo el código del pigmento junto a cada color, ya que los fabricantes suelen ponerle nombres distintos en la etiqueta de los tubos (sobre todo a pigmentos menos tradicionales como el PR177 ), y es la única forma de identificar correctamente un color.
Ahora, cuando uno esta aprendiendo, tampoco es bueno "casarse" con una paleta especifica de colores. Es muy bueno ir experimentando con distintas paletas limitadas, y de distintas "eras" en la historia de la pintura.
Por ejemplo, un día puedes usar una paleta compuesta sólo de colores tierra para pintar a la manera de los viejos maestros, otro día puedes experimentar con una paleta impresionista (como la mía), y en otra ocasión puedes probar los poderosos y transparentes pigmentos modernos (rojos quinacidona, amarillos hansa, y azules ftalo).
Yo también estoy aprendiendo aun, y experimento con paletas distintas de vez cuando. En este cuadro por ejemplo:
Disculpen la mala
calidad de la imagen, la cámara de mi celular no es buena y nunca es
fácil fotografiar un cuadro.
En este bodegon pequeño pintado del natural, los únicos colores de mi paleta impresionista típica que ocupé fueron el azul y el violeta ultramar, y un poco de cadmio, todo lo demás son ocres y colores tierra.
***
Creo que ya nos estamos desviando un poco sobre el tema central de entrada, que son las paletas y no la teoría del color (que es un tema infinitamente más complejo). Quedamos en que ya teníamos resuelto los problemas del orden en la paleta, su tamaño, y su comodidad, para los que pintamos sentados, y en espacios reducidos.
El escritorio sobre
el que pinto, es más cómodo de lo que parece, en serio jajaja.
Pero sigue abierta la pregunta ¿como evitar que la pintura se oxide entre sesión y sesión? La respuesta no la encontraran en ninguna tienda de materiales de arte, sino que en el lugar menos esperado: tiendas de insumos para dentistas. Si, leyó bien, insumos para dentistas.
Imagino que cuando van al dentista notan ese típico "olor a dentista" (que tan nervioso pone, y tan malos recuerdos trae a tantos de nosotros).
La silla del
dentista, uno de los lugares más terroríficos que existen sobre la
faz de la tierra. ¿Que relación puede haber entre este epicentro
de miseria humana, con el arte?, ya lo veremos...
Bueno, ese típico "olor a dentista", no es otra cosa que EUGENOL, el eugenol es un desinfectante muy popular en las clínicas dentales, y alguna vez fue uno de los únicos anestésicos dentales que existían (generalmente para calmar los dolores de muelas). También se lo puede encontrar como ingrediente en la formulación de algunos perfumes (especialmente los de clavo de olor).
El eugenol, usado
por dentistas y perfumistas... y si, también por artistas.
Bien, otra característica mucho menos conocida del eugenol, es que es un antioxidante extremadamente poderoso. Así es, si eres familiar con las técnicas pictóricas clásicas, sabrás que algunos pintores de antaño añadían un pequeño porcentaje de aceite de clavo de olor a su pintura,o a sus mediums, lo que les permitía trabajar húmedo sobre húmedo por mucho mas tiempo.
Eso es debido a que el aceite de clavo de olor contiene un porcentaje de eugenol, que permitia prolongar considerablemente el inicio del proceso de oxidación normal del aceite de linaza.
Si piensas que lo que voy a proponer es añadir eugenol al óleo, la respuesta es un gran NO, no es buena idea hacer eso... terminarás con un aceite de linaza que no se oxidara nunca, y eso es lo que menos queremos. Lo que propongo es infinitamente más simple.
Añade un par de gotas (si, sólo un par de gotas), en un algodón, y déjalo sobre la paleta limpia después de tu sesión de pintura. De esta forma:
Dos gotitas de
eugenol en el algodón bastan, en serio...
Luego, como se imaginarán, procedemos a taparla:
Compacta y espaciosa a la vez, es simple y llanamente perfecta...
Bien, el paso siguiente es sellar la tapa de la paleta con huincha aisladora (la tapa igual trae una goma, pero no es suficiente para aislar el interior de la paleta.
Lo que ocurría ahora en el interior aislado de la paleta , es que las moléculas de eugenol atrapadas dentro, van a "secuestrar" las moléculas de oxigeno que habían en el aire que quedó atrapado en el interior de la paleta. Estas moléculas de oxigeno "secuestradas" por el eugenol, no serán capaces de reaccionar (comenzar el proceso de oxidación), con los ácidos grasos (ácido linoleico principalmente), que componen el aceite de linaza.
En consecuencia, si la sellamos bien, mantendremos la pintura al óleo fresca dentro de la paleta desde días a semanas, sin que se forme esa costra alrededor de nuestro stock de pintura en los pocillos.
Y el eugenol es barato, te pillas frascos de 30 ml hasta por 3 lucas (6 dólares aprox.), y como lo que usas son sólo gotas, rinde bastante.
Piensa que un tubo de 150 ml de amarillo cadmio (que es irremplazable pues los amarillos di-azo que venden como alternativa, no son permanentes del todo, ni tienen opacidad alguna) vale como 40 lucas, y de verdad, de verdad, que lo que uno menos quiere es desperdiciar esa pintura.
Con este sistema pintas tranquilo, con cantidades generosas de óleo (no rastrojos), cosa que se notará en un cuadro, y sin preocuparte de que sacas demasiada pintura del tubo.
Piensa que un tubo de 150 ml de amarillo cadmio (que es irremplazable pues los amarillos di-azo que venden como alternativa, no son permanentes del todo, ni tienen opacidad alguna) vale como 40 lucas, y de verdad, de verdad, que lo que uno menos quiere es desperdiciar esa pintura.
Con este sistema pintas tranquilo, con cantidades generosas de óleo (no rastrojos), cosa que se notará en un cuadro, y sin preocuparte de que sacas demasiada pintura del tubo.
Y hay otra ventaja que pasé por alto. ¿Recuerdas que hace rato escribí que para alguien que está aprendiendo, es bueno ir experimentando con distintas combinaciones de colores, y paletas limitadas?; bueno, con esta paleta, al tener pocillos individuales, puedes sumergir en agua específicamente los colores que no vas a usar. Así también se mantienen frescos durante tu sesión de pintura (y no sólo cuando la sellas con el eugenol)
***
Pero queda abierta una pregunta; ¿puede alguien que tiene la suerte de tener un taller espacioso en el que puede pintar de pie (y por ende usa una paleta grande y tradicional de madera), aprovechar también el método del eugenol?
La respuesta es que si, ya que esta paleta húmeda tiene una "hermana mayor", que también venden en la Nacional de Matias Cousiño, pero no trae "pocillos". Esa dobla en tamaño la que les mostré aquí, y al se basicamente una carcasa, puede alojar sin problemas a una paleta tradicional de madera. Gastaran una gota más de eugenol y un poco mas de huincha aisladora; pero de que se puede; por supuesto!
***
Finalmente, para despedirme quiero recordarles un tema que es imposible no abordar cuando se escribe sobre paletas, y es la forma en la que ordenamos los colores en la misma, que como escribí al principio, no es nada recomendable que sea aleatorio. Para eso les dejo este genial articulo escrito por Robert Gamblin sobre el tema:
Es sumamente didáctico y esclarecedor. Y bueno, ya hemos llegado al final de esta entrada, espero que lo que escribí le sea útil a mas de uno; cualquier duda al respecto sólo escríbeme.
Se despide;
-Diego Villegas Riffo
muy buenos aportes.
ResponderEliminarmuchas gracias!, igual he escrito menos de lo que quisiera. Pero ya saldrán más cosas
EliminarExcelente!!!! Ni sé cómo di con el blog, pero es tremendamente útil lo que explicas. Gracias!
ResponderEliminarExcelente contenido!!!!
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