Bien, llegamos al que probablemente sea el más importante entre los valores objetivos. Ese maravilloso mundo del color. ¿Qué sería de nuestra vida sin colores?.
A quien no le pasó, cuando comenzó en este maravilloso mundo de la pintura, que fue a la tienda de materiales de arte, a comprar sus primeros tubos de óleo, pero se encontró con un montón de colores distintos, todos apilados en un mostrador, como dulces. Todas las gamas de azules, de rojos, de amarillos, verdes, violetas, naranjos. Como 200 colores distintos en una carta, y uno allí sin tener idea de cuales comprar...
Son como dulces, uno quisiera tenerlos todos, pero no siempre se puede...